Si eres empresario, la búsqueda de ingresos es uno de los objetivos principales. Además de las ganancias que puedas obtener de clientes particulares, las Administraciones Públicas pueden darte la posibilidad de prestarles servicios o participar en proyectos.
En todo caso, las Administraciones llevan a cabo estas contrataciones mediante licitaciones. Ahora bien, cada proceso de contratación cuenta con sus propios requisitos que deben ser tenidos en cuenta.
Sin embargo, las licitaciones públicas comparten una serie de requisitos comunes. En concreto, podrían mencionarse los siguientes:
- La acreditación de la condición de la persona (física o jurídica), así como la representación que pudiera intervenir.
- La aportación de la documentación que demuestre la capacidad para contratar:
- Solvencia económica: Indicar la cifra de ventas que la Administración solicite garantizar y la entrega de las cuentas anuales auditadas.
- Solvencia técnica: Demostrar la experiencia con la que se cuenta en el sector de actividad en el que se encuadre la licitación.
- No incurrir en alguna de las prohibiciones para contratar, fundamentalmente no tener deudas con Hacienda y Seguridad Social.
- La presentación de los certificados de calidad (ej: ISO): Este requisito depende del objeto del contrato en todo caso.
- La inscripción en un Registro Electrónico en algunos casos para facilitar la presentación de la solicitud.
